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Mostrando las entradas de diciembre, 2006

Reflexión 6

Ya casi por finalizar este año, me atrevo a hacer un balance. Durante este tiempo he aprendido mucho, y logré conocer un poco más de nuestra realidad teatral. He podido confirmar algunas hipótesis respecto a nuestro mundo actoral y también –lo más interesante-, comprobar que estaba equivocado en muchas de las cosas que tomaba como verdad, lo que ha hecho que vuelvan a mi escritorio como temas por resolver. Van los agradecimientos: A mi grupo de teatro, Forasteros, porque siempre me dieron la mano y su apoyo en cuanto momento necesité. De los nuevos integrantes, que ahora enriquecen este grupo y que siento que este próximo año se ha de consolidar. A Lyz de Chancay, porque me dio la oportunidad de estar en el FESTTA –espero que no sea la última vez- y que gracias a ella conocí a gente de diferentes pensamientos, pero con mucha energía y ganas de seguir en el teatro. Gracias también a los chicos que aguantaron mi soliloquio en aquella playa cercana al castillo de Chancay, Nando, Cecilia,

Reflexión 5

Chateando, un día como siempre, con Lyz. - Puxa, alucina que somos los organizadores del FESTTA INTERREGIONAl 2006. - Ah ya…qué xévere…y… ¿Qué es eso? - Oe que! No sabes lo ke s el FESTTA ¿? - Nopo. - Mira, el FESTTA s l festival d teatro escolar ps. El grupo que gane pasa a la final. - Ok - Oe - q - Keria saber… ¿tienes tiempo del 18 al 20? - Para ¿? - Para venir al FESTTA como jurado ps. - Juat !!! - Jajajaj, si ps. Keremos que seas jurado. - Manya…ya ps ¡!!! Me reí. Terminé mi copa de vino tinto semi seco y me fui a descansar. Una llamada dos semanas después me informaba que estaba oficialmente invitado a participar como jurado en el FESTTA INTERREGIONAL 2006 a realizarse en Chancay, Lima. Me di cuenta que Lyz no estaba bromeando con aquello. Caí en la cuenta que debía de reprogramar mi agenda, claro está, si la encontraba en el desorden de mi biblioteca y que debo de pres

Reflexión 4

Ya casi son las siete de la noche y me siento muy nervioso. Si alguien me pregunta el porqué, tal vez no me entendería. Siento que esta misma emoción me acompaña cada vez que salgo a escena. Pero esta vez, no salgo a escena. Salen mis alumnos. Todos estamos muy nerviosos. No solamente es una evaluación para ellos, sino que también es para mí. Quiero saber qué tanto he podido inculcar en ellos el afán de investigar, de crear, de transformarse, de recordar todo aquello que hemos venido trabajando y que al final, se plasmará en tan sólo unos instantes. Mientras ellos se visten y se maquillan, yo estoy tomando una coke. Desearía tener una copa de vino a mi costado, pero sospecho que no sería una buena opción. Voy al baño y me mojo la cara. Uno y otro chorro de agua fría, fuerte. Tengo diecisiete años y estoy muy nervioso. Es la primera vez que saldré a escena y mi profesor está muy serio. Parece que me va a llamar la atención en cualquier momento. Entro al salón de clases y un amigo me rec